Parvati-Magazine_Marine-Arctic-Peace-Sanctuary_MAPS_Seismic-blasting

¿Te gustaría que bombardearan tu casa? A los habitantes del océano Ártico tampoco.

Antes de que termines esta oración, una sola arma sísmica de aire sacudirá el lecho marino múltiples veces, cada una con un sonido 100.000 veces más fuerte que el de un motor de avión.

Las prospecciones sísmicas son el método preferido por las compañías petroleras para buscar reservas de petróleo y gas enterradas en lo profundo del suelo marino. Para las ballenas y otros animales marinos, esto constituye un ataque violento y traumático de su hábitat. La prospección sísmica los somete a unos sonidos increíblemente fuertes, cada diez segundos, 24 horas al día, por muchos meses. Se sabe que causa pérdida de audición, alteraciones en los patrones de apareamiento, alimentación y migración, encallamientos en playas, e incluso, muerte.

La prospección sísmica no tiene sentido en ningún océano, pero especialmente en aguas vedadas para la explotación de petróleo y gas. Las reservas de petróleo en el lecho marino del océano Ártico no se pueden explotar bajo ninguna circunstancia lo cual asegura que los países mantengan los compromisos del Acuerdo de París. Un daño adicional causado por la perforación para extraer petróleo y gas incluye derrames de petróleo bajo el hielo Ártico que serían imposibles de limpiar. A la luz de las crisis ecológicas y humanitarias que enfrenta nuestro mundo, la prospección sísmica en el vulnerable océano Ártico con el fin de buscar petróleo ̶ lo cual los científicos concuerdan en que debe hacerse en la tierra ̶ no tiene sentido.

Diecisiete especies de ballenas, muchas de las cuales ya están amenazadas, se pueden encontrar en el océano Ártico. Guardianes gigantes del mar, las ballenas se alimentan en las profundidades y revuelven las aguas al liberar cortinas ricas en nitrógeno cerca de la superficie. Esto alimenta el fitoplancton que es responsable por la mitad del oxígeno de nuestro mundo. Bombardear el hogar de nuestros benefactores es un error mortal. La prospección sísmica también amenaza la forma de vida de las comunidades costeras del Ártico que dependen directamente del mar.

MAPS, Santuario Marino para la Paz en el Ártico, detiene para siempre todas las pruebas sísmicas en el océano Ártico al norte del Círculo Ártico. Nuestro mundo necesita aguas tranquilas. Por esto necesitamos MAPS ahora.